Para los que despotrican sin razones valederas
estas costumbres camperas y de quienes la practican
para aquellos que predican tamañas temeridades
sin otras finalidades que aminorar al nativo
estas décimas escribo y en ellas cuatro verdades
Verdades que como un reto han de estar a flor de labios
para castigar a gravios a quien nos falta el respeto
y si a Redentor me meto será porque me imagino
poder seguir el camino de nuestro inicial glorioso
porque me siento orgulloso de haber nacido argentino
y pampa porque en mis venas corren
sangre de aborigen
de aquellos que no transigen ni nos engrillan cadenas
de aquellos que en las arenas de nuestro patrio sendero
fueron dejando el reguero de sangre emancipadora
sangre criolla vencedora en más de cien entreveros
de aquellos que no quisieron nada en concepto de guerra
ni aun el palmo de tierra del lugar donde nacieron
de aquellos que no tuvieron más ley que su autoridad
que suprema voluntad de nuestra soberanía
despreciar la tiranía es amar la libertad
de los que luego plantaron el primer poste esquinero
los que de un nido de hornero su patrio rancho imitaron
los que más tarde regaron con el sudor de su frente
el noble surco imponente tajo de fecundidad
quien va a la posteridad no resbala en la pendiente
y aquellos que resereando curtidos de soledad
ganaron la inmensidad tranqueando siempre tranqueando
de los que fueron paseando sobre esta vasta llanura
su romántica figura cara al sol siempre de frente
como el más fiel exponente de nuestra raza futura
de ese estirpe de varones con que los legó el destino
de eso soy yo argentino pampa sin claudicaciones
y en algunas ocasiones es ápero mi lenguaje
en reacción contra el ultraje que se pretende inferir
al tratar de confundir criollismo con compadraje
argentino por derecho por hombre por tradición
íntima satisfacción que me está golpeando el corazón
arrastrando el pecho argentino por derecho por ley
por razón de herencia argentino por decencia
que es patriotismo del hombre y lo juro por mi nombre
argentino por conciencia