Me fui muy triste pensando por el camino
Y recordaba la tarde cuando te tuve
Contemplaba las figuras de las nubes Igualitas las que miraba contigo
Fue testigo el sol rojo de esa tarde
De lo grande de nuestro romanticismo
Lo que tuvimos no fue algo pasajero Fue
amor sincero de esos que marcan destino
Fue un remolino de pasión y de ternura Al borde de la locura
Fue lo que los dos vivimos Si nos quisimos con pasión intensamente
Ahora que quiero verte Tú me niegas tu cariño
Voy por el mundo a porría por un despecho Y
aquí en mi pecho quieren crecer sus raíces
Yo lo quise y lo quiero todavía Y el alma mía me lo sigue reclamando
Sigo buscando alivio para mi mal
Y en el caudal no encuentro orillas ni fin
En un tilín está guindando mi vida
Por la herida que me causó su puñal
Al meditar de noche cuando me acuesto Entre
dormida y despierta yo que lo estoy tocando
Casi llorando me paro y pido al supremo Porque
será que lo bueno es poco y no dura tanto