Sin duda, sin tormento, sin distracción,
sin prisa, sin las reglas del dos en el dos.
Llegó, venció y no hubo perdedor.
Llegó y bebió hasta entregarse.
Llegó con todo, con nada, con la sonrisa puesta y la camisa abierta.
Con la certeza que la noche encierra.
Con la lengua fuerte, las palabras justas, las caricias llenas, llenas de viajes, llenas.
Con todo, con nada, con lo que vendrá o se irá.
Con baile, con juego, con bosque y claridad, con la presencia infinita de elegir estar
presente.
Sin duda, sin tormento, sin distracción, sin prisa, sin las guerras del dos es dos.
Con todo, con nada, con todo es parte aquí, confiando, rindiéndonos al fin.
Confiando, confiando, rindiéndonos.

Sin duda, sin tormento, sin distracción, sin presencia.
Con todo, con nada, con lo que vendrá o se irá.