Oye,
que llegó la única estrella con el gran Amaray.
Si tú supieras, niña, lo que te pienso.
Si tú supieras, negra, lo que te anhelo.
Nunca tendrías duda,
corazón,
del amor que te tengo.
Porque pa' mí tú eres la única estrella en el cielo.
Si tú supieras, niña, lo que te pienso.
Si tú supieras, negra, lo que te anhelo.
Nunca tendrías duda,
corazón,
del amor que te tengo.
Porque pa' mí tú eres la única estrella en el cielo.
Todos los días que pasan son verdaderos cuñales.
Por no tener esos ojos que curan todos mis males.
Será que vivo a la espera de que vaga algún milagro.
Y te devuelvan las ganas de estar por siempre a mi lado.
Oh, oh, oh, oh.
De estar por siempre a mi lado.
Oh, oh, oh, oh.
Ay, deja que el amor nos ilumine.
Que sea de pasado esa tristeza.
Porque vale la pena,
corazón,
todo lo que he sufrido.
Si el premio que me llevo es tu belleza.
Si el premio que me llevo es tu belleza.
Todos los días que pasan son verdaderos cuñales.
Por no tener esos ojos que curan todos mis males.
Será que vivo a la espera de que vaga algún milagro.
Y te devuelvan las ganas de estar por siempre a mi lado.
Oh, oh, oh, oh.
De estar por siempre a mi lado.
Oye, y yo también.
Eres tú la más hermosa,
la que cuida mis mañanas.
La combinación perfecta,
la que mi cuerpo reclama.
La única estrella en el cielo.
La única estrella en mi cielo.
La única estrella en el cielo.
Tú eres mi vida y mi anhelo.
La única estrella en el cielo.
Eres todo mi consuelo.
La única estrella en el cielo.
Tú, mi princesa, te quiero.
La única estrella en el cielo.
Mi corazón te lo doy entero.
La única estrella en el cielo.
Ay, déjame ser tu curandero.
La única estrella en el cielo.
Te amaré por siempre y no tengo miedo.
La única estrella en el cielo.
La única estrella favorita para mí.
Ay, qué rico.
Pero como dice el gran Paulo Milanes,
la prefiero compartida.