Yo.
Tú ya lo sabes.
Anita,
Russell, oh.
Oh, oh,
oh, oh, oh.
Tú
me haces sentir tan bien con solo una mirada y yo me siento
zen.
Mi corazón acelerado a más de cien.
Te juro que no quiero a nadie más.
Me haces
sentir bien.
Tú me haces sentir tan bien con solo una mirada y yo me siento zen.
Mi
corazón acelerado a más de cien.
Te juro que no quiero a nadie más.
Me haces sentir
bien.
Yo. Oye, Anita, tu nombre es un pecado.
Sí. Y si tú me dejas, yo quiero estar a
tu lado, tú y yo.
Yo. Mirando las estrellas envelezado.
Yo. Yo. Mientras tus manitas
se acenguen contra mi mano.
Oye,
tómate mi amor en serio.
Sabes que lo nuestro ya no es un misterio.
Y que todo lo que necesito, amor, eres tú.
Dime, ¿qué te vas a comportar?
Si me besas, ya no ha vuelto atrás.
Como nube que flota en el mar.
Es así que te voy a llevar porque tú me
haces sentir tan bien con solo una mirada
y yo me siento zen.
Mi corazón acelerado a más de cien.
Te juro que no quiero a nadie
más.
Me haces sentir bien.
Yo. No me digas eso que me pongo tierno.
Yo sé que soy un
loco y yo te quiero, no te miento.
Mira,
vente conmigo y contemplemos el universo y bajo
las estrellas.
Sí. Robarte un beso.
Oye,
tómate mi amor en serio.
Sabes que lo nuestro
ya no es un misterio.
Y que todo lo que necesito, amor, eres tú.
Dime,
¿qué te vas a comportar?
Si me besas, ya no ha vuelto atrás.
Como nube que flota en el mar.
Es así que te voy a llevar
porque.
En nuestro momento somos hijos del viento que
recorre tu rostro y se pierde por tu cuerpo.
Cuando una llama enciende,
¿qué importa el universo?
Si todo lo que importa son nuestros
sentimientos.
Me haces sentir tan bien con solo una mirada y yo me siento zen.
Mi corazón acelerado a más de cien.
Te juro que no quiero a nadie más.
Me haces sentir bien.